En las dos campañas que realizaron CUCAIBA y el municipio, tanto en plaza San Martín como en el Cultur 30, se hicieron 136 actas de donación de órganos.

La vecina Leandra Pahuapé señaló que “hubo muy buena respuesta. Lo lindo es el interés de los jóvenes, menores de 18  años que trataban de inscribirse, al no poder hacerlo se los informaba, y se iban contentos”.

Asimismo agregó que “en la costa atlántica las campañas se hacen en enero, febrero y en Marzo. El objetivo es armar un cronograma y seguir a lo largo del año. La sociedad tiene que tomar conciencia de la importancia de la donación de órganos. Es más probable que necesitemos un órgano a que seamos donantes”.

Pahuapé informó que del 2016 a fines de 2017 hubo un incremento de 2 mil personas en lista de espera. “Hay veces que la persona donante no puede donar todos los órganos, o no son compatibles con el donante. Sólo pueden donar personas fallecidas con muerte cerebral en una unidad de cuidados intensivos. Se lo asiste mecánicamente para que esté con vida”.

Por último, señaló que “hay que hablar mucho el tema en familia, expresarnos. Es importante  porque si la familia decide luego no querer donar los órganos de la persona fallecida, puede decidirlo así, por eso decimos que hay que tratar el tema y respetar la voluntad del donante”.