Aunque El sol del 25 no venía asomando, como dice la letra del gato patriótico compuesto en 1910 por Domingo Lombardi y Santiago Rocca, y no apareció en toda la mañana del sábado, el acto oficial por el 209° aniversario de la Revolución de Mayo, que se desarrolló en el Playón de la Estación del ferrocarril, tuvo calor y también color.
El calor, color y sentimiento que le dieron los integrantes del C.F.I. nº 1 Luis Perego, Ce.A.T.D.I. nº 1 El Roble, Escuela Especial n° 501 Cacique Pincén y Escuela Especial nº 502 Sgto. 1º Carmen Ledesma, que se encargaron de la organización junto al Municipio; los abanderados de todos los establecimientos educativos; la interpretación del Himno Nacional Argentino que hizo María Esther García y acompañaron todos los presentes; las palabras de la profesora Marisol Paolucci (directora del CFI n°1) y Clarisa Fabris (secretaria de Producción); la representación que realizaron alumnos, docentes y actores de las instituciones de la ciudad para mostrar cómo era la sociedad durante ese 25 de mayo de 1810 y el relato de Enriqueta DiazRouliat;los bailarines Juan Carlos Acenal, María Ester Marches, Patricia Guillot y Carlos Tur; y las danzas del grupo Abriendo Fronteras, con las parejas de baile de Roberto Sotelo e Isabel Pérez y Juan Varela y Angélica Ollenard.
También la entrega de banderas distritales que el intendente municipal, Miguel Fernández, quien encabezó el acto, hizo a establecimientos educativos del distrito que según un relevamiento de Jefatura Distrital de Educación no contaban con ellas –aunque son más de 40, simbólicamente las recibieron cinco, las correspondientes a Educación Especial-, las tortas fritas y el chocolate compartidos; y otras actividades que hubo en el espacio como si fuera una vecindad: la Feria EcoFines Verde, la mondongueada preparada por voluntarios de Defensa Civil, el puesto del Colegio los Nuevos Ayres donde se ofrecían bolsas para colaborar con el Taller Protegido Peñi- Hue, y la Feria del Plato armada por padres y docentes de las escuelas especiales 501/502/CeATDI y CFI n°1 para colaborar con las cooperadoras de las instituciones.
Todo ese movimiento completado, por supuesto, con un auditorio al aire libre de concejales, consejeros escolares, fortineratrenquelauquenche, gabinete de funcionarios municipales, fuerzas vivas, autoridades y comunidad educativa, representantes de instituciones intermedias y partidos políticos, y familias, vecinos que se acercaron en honor a esa patria que nacía hace 209 años.
Las banderas de ceremonia que presidieron el acto, declarado de interés público y municipal por el decreto Municipal n°1091/2019, correspondieron al CFIn°1: Santiago Taconau (abanderado), Sofía Seoane y Agustín Hoz (escoltas derecho e izquierdo) portaron la bandera nacional, y Nicole Canale, Facundo Farías y Rocío Hoz, quienes estuvieron acompañados por MarileneGarcía, directora de la EEE n°501..
“De nada de lo que estaba ocurriendo pudo enterarse el vecino, que en la tarde de esa jornada regresó a su casa con un par de pescados colgando de su hombro, pero seguramente tardó muy poco tiempo en advertir que lo sucedido ese día también involucraba la vida su propia vida como la de todos. Porque de comienzos tan trivales como el de esta revolución burguesa y municipal pueden venir consecuencias tan drásticas como las que conlleva la creación de una nueva nación. Nada más, ni nada menos”, dijo la profesora Paolucci, entre el repaso histórico que realizó de lo sucedido en 1810.
En una mirada hacia atrás desde este presente que destacó valores y apuntó a la importancia de retomarlos hoy, la secretaria de Producción municipal, Clarisa Fabris, señaló: “Todo fue parte de un proceso. De un proceso largo. Con idas y vueltas. Con ideas conservadoras y radicales. Con países invadiendo países. Con intentos de revolución fallidos, como el de Martín de Alzaga, en enero de 1809, que no logró su cometido pero derivó en la caída de Liniers y la asunción de Cisneros. Muchos acuerdos y también desacuerdos.Mucha participación. Y fundamentalmente, un pueblo que nunca bajó los brazos. Un pueblo que supo planificar la manera de conseguir el objetivo. Un pueblo que supo tener paciencia para que el tiempo y los esfuerzos compartidos desembocaran en el momento justo para evolucionar”
La funcionaria agregó que revisando esa historia con otros ojos, como mamá de chicos en edad escolar, se hacía otras preguntas vinculadas con estos tiempos, del tipo: “No nos estamos volviendo una sociedad muy impaciente?, ¿no nos vamos olvidando del significado del valor del esfuerzo? ¿Y qué me dicen de respetar los ciclos para la evolución y madurez de todos los procesos”.
“Preguntas, todas ellas –añadió-, que por diferentes caminos desembocan en otra, que las contiene y de hace de esas muchas preguntas, una gran pregunta: ¿En qué momentos nos enfermamos de urgencia y comenzamos a priorizar la inmediatez por encima del trabajo, la constancia y el sacrificio?”
Después se puntualizar que “hace 209 años, Moreno, Belgrano, French, Beruti y tantos otros, nos mostraron con hechos que los logros no se consiguen por generación espontánea. Que no caen del cielo. Y que tampoco son producto de un genio iluminado”, Fabris sostuvo que “los resultados son consecuencia de nuestros actos. Y llegan de la mano de personas como cualquiera de nosotros. De personas que se proponen privilegiar una visión de país y no de individuo. De personas que deciden comprometerse, esforzarse y trabajar en pos de una meta común. Somos nosotros. Cada uno desde su lugar. Maestros y Profesores. Papás y mamás. Familias. Todos…”
“Así como alguna vez nos enseñaron otros mayores, hoy somos nosotros los que tenemos la responsabilidad de transmitirles a nuestros nietos, a nuestros hijos, a nuestros chicos, que lo que cuesta vale. Que no existen las concreciones mágicas. Que las soluciones no son un café instantáneo. Y que para conseguir objetivos es necesario Pensar. Planificar. Avanzar. Ceder. Priorizar. Acordar. Revisar y Corregir rumbos. Perseverar. Y que eso implica compromiso, responsabilidad, esfuerzo y trabajo. Y que todo esto nos involucra a todos”, finalizó diciendo.