300 artistas en escena, patio de comida y una multitud de público fue el marco de la celebración del día del inmigrante ayer a la noche, una fiesta que llegó para quedarse y que marcará su continuidad en el calendario cultural de Trenque Lauquen.
A pesar de la amenaza del pronóstico del tiempo y el abrupto descenso de la temperatura a la noche, la fiesta fue un éxito por donde se lo mire. Y desde las 17 horas, cuando abrieron los puestos de comidas típicas en la Plaza San Martín se generó un intenso tránsito de personas que recorrieron los stands y luego permanecieron en las sillas y gradas expectantes del desarrollo del evento artístico.
El Patio de Comidas Típicas fue una gran atracción durante la tarde. Allí brilló el paté francés, degustado con un cointreau, un licor francés, elaborado a base de cáscaras de naranjas. Al lado se comían pizzas y tarantelas italianas, y también salía la Ensaimada española, una masa azucarada, fermentada y horneada. El aroma mexicano llegaba de la mano de los tradicionales tacos y el aire de mar con la paella del País Vasco que también ofrecía degustar los pinchos, una rabanada de pan muy tradicional.
Para muchos además, fue la primera vez para degustar “Humus” una crema de puré de garbanzos cocidos con jugo de limón proveniente de El Líbano, que su stand también ofrecía pan árabe. Por último, variedades de arroz cocido fue el producto que exponía la comunidad china y Paraguay exhibía sus tradicionales sopas.
ARTISTAS
Cuando cayó el sol las miradas giraron desde los stands de comidas típicas al escenario, montado en la calle Villegas, de manera transversal ocupando el ancho de la avenida; una gran plataforma sobre la que pasaron unos 300 bailarines en escena, una apuesta con pocos precedentes y que fue muy aplaudida.
Esa presentación incluyó la historia de los inmigrantes en nuestro país, que es –en síntesis- la historia de la Argentina moderna, la Argentina como crisol de razas que se acuñó a instancias de los éxodos europeos producidos por la guerra y la desolación, de jóvenes dispuestos a hacerse la “América”.
Esa es la representación que se vio en el escenario, la historia de los que “bajaron de los barcos”, que fue representada por la carroza ganadora de los corsos 2017 y los bailes típicos de cada una de las colectividades y su contextualización con costumbres argentinas y la cultura porteña que albergó a los inmigrantes.
La Dirección Artística estuvo a cargo de Julio Larrosa y participaron artistas integrantes de: Ballet del Club Barrio Alegre; Academia La Cautiva; Taller La Vuelta del Club Tres Llantas; Grupo Raíces de Tradición del Centro de Jubilados; Academia Sentir Argentino; Centro Vasco Euskal Sustraiak; Academia Isadora Duncan; Buenas Noches Tango; Grupo de Baile Flamenco de Mauricio Guerediaga; Academia de Danzas y Gimnasia Sandra Rojas; Centro de Escritores Domingo Ciccoria; Escuela de Canto de Regina Ponce; Taller de Comedia Musical; Taller de Danzas de Koki Brúa y artistas independientes de la comunidad.
Hubo una gran tarea de los empleados municipales, de distintas áreas que armaron y desarmaron las instalaciones y del área de Cultura que diagramaron el espectáculo. El Intendente Municipal, Dr. Miguel Fernández, estuvo durante toda la jornada en la Plaza, entre el público presente.