Durante la tarde de ayer (martes) y la mañana de hoy (miércoles), con la colocación de la chimenea, terminó el montaje de la parte mecánica y ya quedó armado e instalado el nuevo horno pirolítico de última generación en el galpón construido especialmente para tal fin en el PROLIM.
El intendente municipal, Miguel Fernández se mostró conforme con la llegada del nuevo horno.“Se ve la magnitud de lo que significa el horno, que fue una inversión total de 225 mil dólares. Vale lo que pesa. Después de la instalación mecánica viene la parte de electrónica y computación de la sala de monitoreo y, por último, la obra de gas”, explicó.
Fernández indicó que en total el nuevo horno pirolitico, con todas las adecuaciones necesarias demandará a la cartera municipal un total de 12 millones de pesos. “Vamos a comprar un móvil de transporte adecuado para el movimiento interno y, además, se comprará un contenedor refrigerado para poder acumular el residuo patogénico porque si eventualmente hay una falla, se puede seguir brindando el servicio”, detalló el Jefe Comunal y señaló la necesidad de generar la logística del nuevo servicio.
“En primer lugar, lo vamos a habilitar en el OPDS, que es una deuda que tenemos pendiente desde hace 25 años, para brindar el servicio a los centros municipales primero, y después vamos a habilitarlo como un centro regional. Cuando sea regional, podremos brindar el servicio a los generadores de residuos patogénicos privados”.
EL HORNO
El nuevo horno de última generación fue adquirido a la empresa INCOL, con sede en San Martín, provincia de Buenos Aires, y una vez en Trenque Lauquen personal especializado, con la ayuda de una grúa de gran tamaño –sólo una de las partes pesa ocho mil kilos y el equipo en total, unos 22 mil kilos-, lo descargó en el PROLIM.
El sub Secretario de Servicios Públicos, Adhemar Enrietti, detalló que “el montaje completo demandará cinco días; ahora se hizo el montaje mecánico. Luego, en unos días, los representantes de la empresa volverán con el tablero eléctrico y la parte computada del horno, que tiene muchos sensores que trabajan en automático”. El equipamiento electrónico estaría llegando la semana que viene para finalizar el montaje.
Mientras tanto, Camuzzi deberá aprobar los planos de obra de la conexión del gas natural desde la vía pública hasta el horno y las medidas de seguridad del equipo. Ese trámite podría demorar entre una semana y diez días. Posteriormente la empresa MEGA Ingeniería, que ganó la licitación y ya tiene los planos de combustión del horno, hará la conexión y colocará dos estaciones de regulación de gas en un trabajo que podría demorar un plazo de 35 días aproximadamente.
Con todos estos pasos cumplidos, el horno pirolítico nuevo estaría funcionando a fines de marzo, listo para hacer la deposición final de los residuos patogénicos del distrito de Trenque Lauquen.
La Comuna realizó una inversión cercana a 1.900.000 de pesos en la estructura que ya alberga al horno pirolítico y que tiene 16 por 20 metros (320 mts2), cubiertos con conexión de gas industrial e instalación eléctrica industrial.
Además cuenta con dos portones, una altura desde los 5 a 7 metros y también oficinas y una sala de control. Son 320 metros cuadrados de galpón y 25 de oficina. Dos playones para el lavado y recepción de los vehículos de 220 metros cuadrados cada uno. Y a todo esto se le anexará una cámara de frío para resguardar los residuos ante cualquier eventualidad..
Si bien el servicio comenzará a trabajar con los residuos del Hogar Marcelo Castella y del Hospital Municipal “Pedro T. Orellana”, a futuro se prevé incinerar los patogénicos de los distritos de Pellegrini, Salliqueló, Tres Lomas, Carlos Tejedor, Guaminí y Rivadavia, y así dar cumplimiento a un convenio firmado por los intendentes de cada partido para establecer el primer consorcio en esta materia en la provincia de Buenos Aires.
El convenio establece también que el distrito de Pellegrini será el encargado de la logística y los camiones de recolección que pasarán por cada ciudad para traer al Centro de Operaciones de Trenque Lauquen los residuos. Y se calcula que cada municipio se ahorrará al menos el 50% del gasto actual en este ítem, que ahora está tercerizado en una empresa privada que opera de manera monopólica en territorio provincial.
El Prolim contaba con dos hornos pirolíticos adquiridos en 1995, es decir hace 24 años. Fueron reparados en varias oportunidades y su vida útil se agotó hace muchos años. Estos hornos sirven para el tratamiento de los residuos patológicos de carácter hospitalario como jeringas, guantes usados, restos de sangre, fluidos, elementos cortopunzantes contaminados y todo aquel material que haya tenido contacto con microorganismos potencialmente patógenos. Con la incineración se obtiene la eliminación absoluta de los gérmenes y tóxicos sin dañar el medio ambiente ya que las cenizas que quedan luego del proceso son estériles e inocuas.
La puesta en funcionamiento del horno pirolítico es uno de los aspectos clave en el marco del proyecto del Polo Ambiental Integral que la Municipalidad inició en 2016 y pretende desarrollar a lo largo de los próximos años.
En el Polo Ambiental Integral se asentarán diferentes emprendimientos municipales relacionadas a la separación y ordenamiento de residuos sólidos urbanos y su puesta en valor para la comercialización como así también iniciativas relacionadas a la investigación y desarrollo.