Compartir

Este sábado (20) a las 20 en la Casa de la Historia y la Cultura (Belgrano y Scalese) se realizará la inauguración de la muestra “Pequeñas luces”, una exposición de fotografía, pintura y grabado organizada por Casa Taller para celebrar su cuarto aniversario y que cuenta con el acompañamiento de la dirección de Cultura municipal.

La exposición “Pequeñas luces” está vinculada a pensar la naturaleza desde las artes visuales y el público podrá apreciar la propuesta “Mirame a los ojos”, de Alejandro Contreras, quien utiliza fotografías de archivos del SXIX, retratos a indígenas y las imprime en hojas de árboles utilizando clorofila, como un gesto de devolverlos a lanaturaleza.

Además de este trabajo se podrán ver obras de Néstor Martin, Florencia Hazelhoff, Miriam Arricau y Daniela Pérez de Arce, con el acompañamiento musical de Pablo Pérez, cantante de Puentes Fangos.

En este marco, el domingo 21, Alejandro Contreras coordinará un taller de Clorotipia (una técnica de imprimir fotografías utilizando laclorofila) en Casa Taller, que funciona en Avellaneda nº 639. Los interesados/as pueden inscribirse comunicándose al teléfono (11) 6351-3309 de 8 a 15.

 

. LA MUESTRA

Pequeñas luces” es una vidriera en donde se pueden ver producciones variadas de las artes visuales. Intenta establecer desde la vereda una relación entre e ladentro y el afuera, entre lo público y lo privado, entre la obra y elespectador.

Acerca de los objetivos de la exposición, desde Casa Taller comentaron que “queremos generar en los vecinos/as la posibilidad de relacionarse con el arte de una forma casi azarosa, mientras transitan la ciudad podervincularse con las expresiones de artistas locales y de la región sintener que ir a los lugares convencionales del arte; detenerse en la vidriera y poder llevarse información del artista”.

Es una forma de visibilizar y difundir producciones artísticas, susobras van a estar expuestas las 24 hs de los dos meses de exposición envidriera y redes.

“Pequeñas luces” surge de la luz de las luciérnagas de Didi Huberman que confronta con la gran luz del Paraíso de Dante, el de los reflectores de propaganda fascista, en Pasolini, o el de la iluminación cegadora emitida de los focos del espectáculo. El de lasluciérnagas es un “resplandor errático” pero resplandor vivo, resplandordel deseo y de poesía encarnada. Quizás el arte contemporáneo no puedepretender más que moverse como lo hacen las luciérnagas cuando danzan enun “frágil y fugaz momento de gracia que resiste al mundo del terror”.(Ticio Escobar, Aura Latente).