El espacio productivo “Abriendo Puertas” de los barrios Güemes y Los Robles quedó inaugurado ayer con un acto público en el predio ex La Serenísima donde funciona ahora este proyecto de panificados y costura que genera contención y salida laboral y productiva para un grupo de vecinos de esos barrios.
“Abriendo Puertas” fue votado por los vecinos en el Presupuesto Participativo 2016. Este proyecto se apoya en la creación de una cooperativa barrial. El Municipio realizó una intervención edilicia en el predio mencionado, en un galpón de 85 metros cuadrados que fue reciclado por personal de la Secretaría de Obras Públicas. Se adaptó para el funcionamiento de una sala de panificados y un taller de costura, con espacios para la administración, circulación y depósito. También se lo proveyó de la maquinaria necesaria como licuadora, amasadora y sobadora.
Adriana Morard, vecina del Barrio Los Robles, Presidente de la Cooperativa y referente del Proyecto habló en el acto. Dijo: “Estoy muy contenta, agradezco a la gente que trabajó acá, a mis compañeros. Este proyecto de costura, hace diez años que se viene planeando. Hoy cumplimos un sueño. Sé que los vecinos se van a sumar a esto que recién se inicia”, sostuvo y agradeció a los intendentes “Barracchia y Fernández” por los logros del barrio Los Robles.
La Directora de Asuntos Comunitarios, Mariana Singlar, recordó que ésta “es un obra largamente esperada, desde 2012 que se viene trabajando con este proyecto. El compromiso estuvo siempre, esto es merecedor de ustedes para que lleven adelante lo que tanto anhelan. Tener trabajo, generar producción. Que se disfrute, es de ustedes”.
Por último, el Intendente Miguel Fernández, enumeró las “adversidades” que se superaron para alcanzar la concreción del proyecto. “Necesitamos generar trabajo genuino. Queremos dar herramientas para que la gente salga adelante con su trabajo, con su esfuerzo. Ayudarla, que generen su negocio, su emprendimiento. Queremos hacer una cocina comunitaria, un molino harinero, hay mucho para hacer”.
“Hay que animarse, hay que empujar, tener perseverancia. Esta fábrica tiene que ser proveedora de servicios. Hay que dejar volar la imaginación. Necesitamos trabajar juntos para que la gente esté mejor. Venimos cumpliendo con cada cosa que prometemos. Tratamos de hacer las cosas bien. Lleva tiempo, lleva dinero, pero acá están los resultados. Sueñen más, inviten a otro a soñar, porque el sueño es contagioso”, concluyó.
El tradicional corte de cintas estuvo a cargo de los vecinos Ricardo Rosa, Yanina Peust, Isabel Larramendi y Miriam Salomón; la Directora de Asuntos Comunitarios, Mariana Singlar; el arquitecto Carlos Marino, responsable de la obra; Jorge Cuscueta, maestro pastelero, padrino del proyecto y al Intendente Miguel Fernández.