La secretaria de Producción, Clarisa Fabris, mantuvo ayer (jueves) junto a sus pares de la región, productores y representantes de las distintas cámaras de comercio una reunión en Pehuajó con el Cónsul de Vietnam, Chung Nguyen Van, y la directora de la Casa de Asia, Lien Pahm, con el objetivo de establecer un contacto comercial con la zona asiática.
Fabris, luego del encuentro señaló que ambos representantes asiáticos “expresaron cuáles son las necesidades que tiene Vietnam, que es un mercado de 95 millones de personas con una gran necesidad de alimentos y una incapacidad física que es la cantidad de terrenos para producir”.
Asimismo, agregó que “esto da una proyección de trabajo a largo plazo si se generan esos lazos comerciales. Ellos puntualizaron en lo que tiene que ver con la carne o lo que son los commodities con algún tipo de agregado de valor como el maíz pisingallo, las legumbres con algún tipo de proceso de lavado y lustrado, quesos, leche, miel y otras cuestiones específicas”.
Fabris destacó que Lien Pahm se propuso como nexo. “Ella representa a 10 países del sudeste asiático que componen un bloque de 600 millones de personas y hay una sola cámara de comercio. Tanto la Casa de Asia como los consulados se contactan con esas cámaras que tienen los registros de importadores y exportadores. El canal de comunicación se genera más rápido, porque es la Casa de Asia quien presenta al posible exportador y lo pone en contacto con el posible importador”.
En el encuentro, Fabris pudo presentar al municipio local en relación a la producción y posibles exportaciones.
“Queremos transmitirle a todos los productores que no crean que esto va a ser ya. Los asiáticos cierran los negocios cuando primero hay un canal de confianza. Un dólar para ellos no es diferencia, pero sí la confianza. Hay que armar un proyecto sólido, que tenga contenido y que vaya avanzando en los pasos necesarios para entrar en el circuito de la exportación, no es sencillo pero no es imposible”, explicó-
En ese sentido agregó que “esto significa que hoy se empieza a trabajar en esta idea, pero quizás hasta dentro de un año y medio o dos años no se exporta. Ese es un punto que tenemos que aprender como argentinos, los procesos son largos, pero cuando uno tiene foco en un objetivo final que es superador, hay que mantenerlo en el tiempo”.