Durante el acto central por el 147° aniversario de Trenque Lauquen, se pudo escuchar el mensaje grabado de la presidenta de la Comunidad Mapuche Tehuelche Cacique Pincén, Isabel Araujo, quien no pudo estar presente por encontrarse en Mar del Plata, participando en el Congreso de Salud.
“A 147 años de la fundación de Trenque Lauquen, en este nuevo aniversario nuevamente tenemos la posibilidad de tener la voz de la otra cara de la historia, de una historia que tiene dos actores principales, primeramente mis ancestros/as, el Lonko Pincén, quien habitó y habitamos el territorio porque somos las generaciones vivas, como pueblos preexistentes a estos estados, y a la creación de este distrito; y la contracara de quien fue en su momento el Coronel Villegas”, comenzó diciendo en su mensaje.
Tras reflexionar sobre el proceso vivido por los pueblos originarios, Araujo destacó el “diálogo”, que existe con la Municipalidad de Trenque Lauquen, en la persona del Intendente Miguel Fernández, y el trabajo que se viene realizando con la “preservación del sitio arqueológico, sagrado, ancestral y espiritual que se encuentra en la Ampliación Urbana”. Al respecto señaló que “es un patrimonio cultural indígena, que pertenece a quienes hoy habitamos el territorio de la hoy, ciudad de Trenque Lauquen”.
A continuación, se escuchó el mensaje de Agustina Brizuela y Anahí Mansilla, integrantes de la Comunidad Mapuche Tehuelche.
“Trenque Lauquen es un lugar que contiene una historia milenaria, 8 mil años de preexistencia, ocupación, y continuidad de grupos originarios habitando nuestro paisaje, porta en su nombre un vínculo profundo con su identidad indígena”, manifestó Anahí Mansilla.
Por su parte Agustina Brizuela señaló que “nacimos y crecimos aquí, somos parte de esta comunidad, buscamos valorizar nuestras raíces, orígenes e identidades a través de los lenguajes artísticos que alojamos, puentes de reconexión, escucha y expresión con nuestra cultural ancestral; así tuvimos la posibilidad de nutrirnos de un universo vasto, potente, silencioso y silenciado, pudiendo trascender la discriminación, desvalorización y desconocimiento que cargan estas realidades con las que crecimos”.
También señaló que reivindicar a los pueblos indígenas “nos permite ser y poner a la vida en el centro de la escena”.